Como todos sabemos, a la hora de comprar un coche no solo nos gastamos el dinero en ese pago por el coche, también esta compra genera una serie de gastos por uso de los cuales el más común por norma general es el gasto en gasolina y por si fuera poco, con el panorma actual el precio de la gasolina se ha disparado aún más, por eso, venimos a desmentir una serie de mitos sobre el ahorro de combustible para que tengáis una conducción eficiente.
1º Usar marchas largas
Es bien sabido que circular en una relación de marchas largas y con unas revoluciones bajas tiene beneficios en el gasto de combustible, pero, un abuso de esta medida puede forzar demasiado el motor y por lo tanto crear averías en el mismo.
Es decir, un coche de gasolina nunca deberá circular por debajo de las 1.500 rpm ni un diésel por debajo de 1.200 rpm ya que sino eso hará que el motor esté menos revolucionado de lo que debería y que debamos pisar el acelerador más de lo normal para que el coche responda, lo que se traduce en un mayor consumo de combustible.
2º Punto muerto en bajadas
Existe la falsa creencia de que si al bajar una pendiente, metemos el punto muerto, el consumo de combustible disminuye considerablemente ya que “el motor no ejerce movimiento” pero esto no es así ya que el ahorro es mínimo y por si fuera poco, al tener que recurrir constantemente a los frenos puesto que el coche se acelera en gran medida al no tener retención del motor estamos forzándolos mucho, lo que se transmite en un gran desgasto de las pastillas de freno, los discos y los líquidos y encima nos ponemos en peligro, así que es una medida que no hay que tener en cuenta para nada
3º Bajar las ventanillas
En este mito hay que matizar bien, al circular por ciudad si es más eficiente conducir con las ventanillas bajadas antes que poner el aire acondicionado, pero a la hora de circular por una autovía o alguna carretera en la que vayamos a una velocidad más elevada, el consumo por llevar las ventanillas bajadas se dispara ya que la aerodinámica empeora considerablemente, lo que se traduce en tener que pisar más el acelerador y por lo tanto un mayor consumo.
Tampoco podemos pasar por alto que al bajar las ventanillas en la autovía se genera un ruido del aire entrante y saliente que es bastante molesto y poco seguro por las ráfagas que crea.
4º Rellenar poco el depósito
Existe la creencia de que es más efectivo apurar el depósito de combustible hasta el final y una vez se gaste, ir llenando con pocos litros pero esto solo hace que la gasolina se evapore más rápido, por lo que el consumo aumenta e incluso favorece la aparición de averías en algunos componentes sobre todo en los inyectores o en la bomba de gasolina.
Lo que realmente deberíamos hacer si deseamos tener una conducción lo más ahorradora posible sería tenerlo lleno al máximo e ir repostando a medida que fuese gastándose el combustible.
5º Calentar el motor antes de salir
Con los coches antiguos, esta medida si tenía un sentido, pero hoy en día, los coches actuales cuentan con un sistema de arranque inmediato por lo que no tiene sentido, es más incluso estaríamos gastando un poco de combustible de más, para ahorrar combustible lo que debemos hacer es no realizar acelerones bruscos nada más comencemos nuestra marcha.
6º Productos para el combustible
Los aditivos para mejorar el rendimiento de la gasolina no son nada recomendables, los combustibles ya vienen repletos de aditivos de la refinería, el problema de añadirle más reside en que puede existir una mala interacción entre los aditivos de la propia gasolina con los del producto nuevo que añadamos, lo que puede generar residuos sólidos que obstruyan los conductos de alimentación.
7º Usar gasolina con más octanos
En España a la hora de repostar contamos con los opciones, la gasolina de 95 y 98 octanos, como todos sabemos, a mayor octanaje, más pura es la gasolina y a su vez más cara.
Es cierto que para el motor en sí es mejor utilizar la gasolina de 98 en vez de la de 95, pero encuanto a eficiencia y rentabilidad hemos hecho los cálculos y el alargamiento del depósito incrementa en torno a un 3% mientras que el ahorro por usar gasolina de 95 en lugar de 98 se sitúa en torno a un 8% por o que no sale rentable en casi ningún supuesto repostar 98 antes que 95 ya que nos saldría un 5% más caro el depósito.
El único caso en el que sería recomendable repostar con gasolina de 98 octanos es cuando el propio fabricante lo indique como necesario.